Hoy sentada en mi escritorio, pensé en ti, en tu cabello color del trigo, en tu sonrisa encantadora. Es irónico porque sé que tú jamás piensas en mí.
Mientras estamos en clase me sorprendo observando cada uno de tus movimientos. Y también veo que yo para ti no existo. Soy una parte de tu mundo que no puedes ignorar pero de la que fácilmente puedes prescindir.
No entiendo cómo fue que me hice ilusiones contigo, pero fue desde el primer momento en que te conocí. Me impresiono tu seguridad y tu carácter. Recuerdo cuando me di cuenta de cuan inteligente eras, te admire. Eres como esa persona que mi mente llevaba años armando. Eres perfección. Cada fibra, cada célula que tú eres. Solo puedo terminar diciendo: me gustas, pero soy realista y sé que yo a ti no.
Sharon Eliana
2 comentarios:
Uf! Fuerte! Lo que más me impactó fue que dijeras "eres perfección". Yo creo que nadie es perfecto pero nosotros hacemos que una persona imperfecta terminé siendo perfecta para nosotros.
No te digo que sea malo, pero a veces es un poco cruel de tu parte pensar tanto en él sabiendo que es un amor no correspondido! Pero bueno y alguna vez le has preguntado qué siente él? A veces por miedo al ridículo, al rechazo y demás no nos atrevemos a hacer cosas que nos podrían beneficiar. Aunque luego duela! Creo que no es malo jugarsela por algo de vez en cuándo! EL QUE NO ARRIESGA NO GANA :) te lo digo de corazón.... Como experiencia propia! Un abrazo muy apretado. Te espero en mi espacio.
http://smaointe-mire.blogspot.com
Me ha encantado este post.
Las cosas que piensas al ver a la persona que te gusta y terminar siendo realista...
Alto.
Creo que no podemos asegurar que el chico no siente nada por ella.
Y que tal si el también vigila sus movimientos? Si la cree su musa?
No podemos asegurar nada y arriesgarnos a creer nuestra propia mentira.
Debemos esforzarnos un tanto y confesar lo que sentimos.
Te confieso algo?
Yo era exacta a la chica que escribió esto... Solo pensaba en lo maravilloso que era ese chico, me sorprendí cuando de un instante a otro lo tenia frente a mi diciéndole cuanto me gustaba.
Y para terminar con un buen final... el me confeso que yo era correspondida.
No se porque dije esto, pero entiendo que a veces el amor nos vuelve ciegos.
Repito, me ha encantado el Post.
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